CAFE SUIZO, UNO DE LOS GRANDES CAFÉS DE LOGROÑO
El CAFÉ SUIZO. PRIMERAS NOTICIAS Y SU PROPIEDAD A LO LARGO DEL TIEMPO
Las primeras noticias, probablemente tardías, de un Café Suizo en Logroño, datan de 1874 cuando es citado el "café de las Delicias o Suizo" en un auto judicial publicado en el Boletín Oficial Provincial.
En el 'Anuario de la Industria de la Magistratura y de la Administración de 1881', se incluye el establecimiento de Matossi, Fanconi y Cía en la calle Delicias, 39 (Actual M. Villanueva).
En el 'Anuario de 1886', se cita como propietario del 'Café Suizo' a "Cecilio Modrego, sucesor de Matossi". Poco después, la 'Guía Chapel-andri' localiza este local en su emplazamiento definitivo de la Avda. de la Estación (hoy Avda. de la Constitución/Bretón de los Herreros).
Cecilio Modrego, se asociará en septiembre de 1914 con Eugenio Treviño Manero constituyéndose la razón social 'Modrego y Treviño'.
En 1915 Cecilio abandona definitivamente su vinculación con el Café Suizo y fallecerá un año después en Bilbao, y en diciembre de 1917 Eugenio Treviño Manero cederá su propiedad a los hermanos Pedro y Gregorio Rama que también serán mantenedores del Gran Casino.
Finalmente en 1922 se hace cargo de este café Francisco Alegría.
'EL SUIZO' DE MATOSSI, FANCONI Y COMPAÑÍA.
En el 'Anuario de 1886', se cita como propietario del 'Café Suizo' a "Cecilio Modrego, sucesor de Matossi". Poco después, la 'Guía Chapel-andri' localiza este local en su emplazamiento definitivo de la Avda. de la Estación (hoy Avda. de la Constitución/Bretón de los Herreros).
Cecilio Modrego, se asociará en septiembre de 1914 con Eugenio Treviño Manero constituyéndose la razón social 'Modrego y Treviño'.
En 1915 Cecilio abandona definitivamente su vinculación con el Café Suizo y fallecerá un año después en Bilbao, y en diciembre de 1917 Eugenio Treviño Manero cederá su propiedad a los hermanos Pedro y Gregorio Rama que también serán mantenedores del Gran Casino.
Finalmente en 1922 se hace cargo de este café Francisco Alegría.
'EL SUIZO' DE MATOSSI, FANCONI Y COMPAÑÍA.
Hay que mencionar sobre su primer propietario Matosi, Fanconi y Cía, que la familias Fanconi y Matossi procentes de Suiza se instalaron en España en el s. XIX, dedicándose a la pastelería siendo Francisco Matossi "el inventor del bollo suizo". Posteriormente, ampliaron su negocio, y se convirtieron en propietarios o co-prietarios de muchos de los cafés suizos distribuidos por la geografía española. De ellos, el más famoso, fue el de Madrid, inaugurado el 3 de junio de 1845 (1919) siendo muy pronto, el prototipo español del café tertulia . En una de ellas participaba con frecuencia el ilustre logroñés Amos Salvador.
Postal A. Muro /Se puede ver El Suizo a la izquierda. |
'EL SUIZO' DE CECILIO MODREGO A FRANCISCO ALEGRÍA
El 'Gran Café Suizo estuvo en sus primeros años decorado de forma elegante y hasta 1897, disponía de un pequeño billar francés y espejos. Por esa época en su salón se colgaron los cuadros de Carmelo Apellániz, del 'Patio de los Leones' y de la 'Galería Central del Generalife' que según las crónicas eran "de una magnífica y elegante factura" y por supuesto no faltaron las tradicionales mesas de mármol.
En 1922 (ver recorte superior) con el cambió de propiedad a Francisco Alegría se realizó una reforma profunda y se cambiaron sus divanes, veladores, mesas y espejos adaptando y modernizando el local a los nuevos tiempos.
En 1922 (ver recorte superior) con el cambió de propiedad a Francisco Alegría se realizó una reforma profunda y se cambiaron sus divanes, veladores, mesas y espejos adaptando y modernizando el local a los nuevos tiempos.
Desde este lugar, se vivió la historia de Logroño con momentos alegres para la ciudad y otros cargados de emoción, como por ejemplo cuando el sindicato de regantes invitó a la tropa del regimiento Bailén a desayunar en el 'Suizo' antes de marchar a la guerra de Cuba.
Fue un café que tuvo siempre un protagonismo destacado en los San Mateo y otras festividades llegando a vender incluso, las entradas a los toros. Más tarde, cuando llegaron los "sport" desempeño su función de anfitrión de múltiples reuniones, y así podemos citar, que en el local del Café Suizo, "con gran entusiasmo" tuvo lugar en marzo de 1923 la anunciada convocatoria para constituir-fundar 'El Club Ciclista Logroñés'. Fue también sede social del 'Club Deportivo Logoño', y en sus mesas se gestó la decisión de la construcción de Las Gaunas. Años después, también en este café se decidió la construcción de 'Las Chiribitas', del Deportivo Maestranza Aérea (1944).
La tradición del fútbol y el Café Suizo también perduró en los años 40 y 50 del s. XX con el Deportivo Maestranza Aérea |
Tampoco hay que olvidar que además de café, fue fonda . y al igual que otros locales de este tipo, los hospedados vendían sus productos, pasaban consultas médicas, ópticas y odontológicas, se cerraban tratos, o se hacían todo tipo de demostraciones, incluso con piano. Y en algunos casos, el Suizo servía de intermediario o de primer contacto.
El café era un lugar de gran actividad y así, el propio Cecilio Modrego además del café tuvo otros negocios entre los que destaca la tejería mecánica de "Cecilio Modrego y Sobrino', cuya especialidad era "la baldosa fina", de la que se podía encargar directamente en 'el Suizo'.
El café era un lugar de gran actividad y así, el propio Cecilio Modrego además del café tuvo otros negocios entre los que destaca la tejería mecánica de "Cecilio Modrego y Sobrino', cuya especialidad era "la baldosa fina", de la que se podía encargar directamente en 'el Suizo'.
Este café de Logroño, fue al igual que otros acreditados locales de finales s. XIX una alternativa al ocio ofrecido por el Teatro Principal, en el que sin ser un café-teatro o café cantante, se representaban ocasionalmente pequeñas obras, y especialmente espectáculos de magia, ilusionismo, hipnotizadores, adivinadores... o incorporaba a su horario nocturno, pequeños conciertos de guitarra, bandurrias, cancionistas, jotas, flamenco y baile. Sus espectáculos, por lo general, solían celebrarse desde las ocho y media hasta media noche. Ver. 'La "vida" en los cafés logroñeses entre 1890 y 1900' de Inmaculada Benito Argaíz BERCEO Nº169
Este establecimiento gozó de una excelente cocina y durante bastante tiempo fue uno de los lugares más acreditados para la celebración de banquetes. En Logroño pasaron años, para que la alta sociedad gozara de los "menús selectos" del Gran Hotel Comercio (1891), las Amescoas (1896) o el Grand Hotel (1914), por lo que el Suizo, junto a algunas Sociedades y Casinos, fue uno de los establecimientos preferidos para este tipo de acontecimientos.
Así, cuando su espacio era insuficiente, incluido su jardín de verano "poético y frondoso" que llegó a tener 40 sillas metálicas plegables, se prestaban sus servicios de catering en la escuela de párvulos o en el teatro Principal.
Por ejemplo, en junio de 1890 con la inauguración de la Tabacalera logroñesa se eligió al 'Café Suizo`, para servir en el teatro la célebre cena homenaje a Amos Salvador:
LA RIOJA 1890: "El servicio muy bueno y los manjares muy bien presentados, cosas ambas que honran al dueño del café Suizo D. Cecilio Modrego. He aquí el menú: Menestra, Salmón a la mayonesa. Ternera con setas. Jamón a la gelatina. Aves asadas. Entremeses: Lengua a la escarlata. Salchichón. Aceitunas. Encurtidos.- Postres: Queso. Flan. Fresas, Helados.- Vinos: Medoc, Jerez, Champagne, Licores, café y cigarros".
En la Guía Chapel-Andri, también encontramos un ejemplo más modesto de los servicios de restaurant, en este caso, con motivo de los S. Mateo de 1894. Es curioso observar los horarios de las comidas, por entonces, a la europea (ver anuncio).
En sus inmediaciones durante años tuvieron parada los carruajes y los diversos vehículos a motor que los fueron sustituyendo. En algunos casos, se alternaban las salidas, según el día de la semana con el Café Comercio o el cercano hotel París. También sabemos que Isidro Martín fue uno de los empleados de la "Administración de coches del Suizo" (1920), que por aquellos años compartía el mismo lugar que el valorado limpiabotas y mozo del Suizo, quien no podía ser cualquiera, ya que para presentarse al puesto se pedían buenas referencias.
En sus mostradores se despacharon multitud de billetes de diferentes compañías de transportes de viajeros, pero entre los primeros carruajes de los que tenemos referencia, podemos citar los de "La Esmeralda" que unían Logroño con Ortigosa y Villoslada. Luego vinieron otros más modernos como los de la Nueva Estellesa, los de Soria...
De su esquina en los años veinte también salieron los primeros "coches" con fines turísticos a la romería de la Luz, baños de Arnedillo y Fitero e incluso a la Feria del Pilar. En su proximidad se instaló un depósito de gasolina y se localizaban los primeros automóviles de alquiler" (taxis) como el de "Tamayo".
LA HISTORIA DE LOGROÑO DESDE EL CAFÉ SUIZO
De su esquina en los años veinte también salieron los primeros "coches" con fines turísticos a la romería de la Luz, baños de Arnedillo y Fitero e incluso a la Feria del Pilar. En su proximidad se instaló un depósito de gasolina y se localizaban los primeros automóviles de alquiler" (taxis) como el de "Tamayo".
Logroño no fue una excepción, por sus cafés pasaba la vida de la ciudad, se recibían a los forasteros y era el mentidero de todo lo que acontecía. En sus mesas, en sus salones, además de los parroquianos habituales, se refugiaban los artistas del teatro, los viajantes de comercio, los paisanos de compras a la capital, los que esperaban los carruajes...
Los tiempos de grandes cambios que tocó vivir al CAFÉ SUIZO, casi se pueden resumir por el callejero de su ubicación; primero 'Calle de la Estación', después "Tirso Rodrigáñez", más tarde "Capitán Galán" y finalmente "José Antonio Primo de Rivera' (hoy calle Avda de La Rioja).
DESDE EL GRAN CAFÉ SUIZO RAFAEL TUBAU TESTIGO DE LOGROÑO Los tiempos de grandes cambios que tocó vivir al CAFÉ SUIZO, casi se pueden resumir por el callejero de su ubicación; primero 'Calle de la Estación', después "Tirso Rodrigáñez", más tarde "Capitán Galán" y finalmente "José Antonio Primo de Rivera' (hoy calle Avda de La Rioja).
En este documento, le recuerda la anterior visita a Logroño que años antes hicieron juntos, en la que entre otras anécdotas, tuvieron que pedir socorro al Ayuntamiento para poder comer el "rancho de mercat" (probablemente se refiere a la Cocina Económíca). La pérdida del baúl, y el suceso de cuando fueron a Gobernación, y recibidos por el gobernador, éste, les emplazó a abandonar la ciudad en 24 horas...
Comenta con alivio: "que tiempos tan diferentes a los de hoy", que tiene contratada cinco representaciones y viene de trabajar con su compañía de vodevil en Zaragoza, Vitoria, e irá a Bilbao, San Sebastián y Santander...
Comenta con alivio: "que tiempos tan diferentes a los de hoy", que tiene contratada cinco representaciones y viene de trabajar con su compañía de vodevil en Zaragoza, Vitoria, e irá a Bilbao, San Sebastián y Santander...
Dice de esta visita: "esta ocasión son momentos más alegres en los que esta vez sí, me puedo permitir obsequiaeme con ¡¡los legítimos caramelos de café con leche de Logroñooooo !!"
Rafael Tubau, después de la guerra civil trabajó en el 'Molino de Barcelona' y escribió algunos curiosos manuales sobre el humor teatral, destacando 'Sketches humorísticos representables'.
Bien podía ser este actor, un ejemplo de uno de los miles de forasteros que pasaron por este café y de los cientos de artistas de todo tipo que actuaron en el 'Café Suizo' de Logroño.
Rafael Tubau, después de la guerra civil trabajó en el 'Molino de Barcelona' y escribió algunos curiosos manuales sobre el humor teatral, destacando 'Sketches humorísticos representables'.
Bien podía ser este actor, un ejemplo de uno de los miles de forasteros que pasaron por este café y de los cientos de artistas de todo tipo que actuaron en el 'Café Suizo' de Logroño.
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ResponderEliminarEnhorabuena, te superas en cada nueva entrada sin dejarte ningun detalle. Gracias
ResponderEliminarGracias por tu amable comentario, que anima mucho.
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