HISTORIAS DEL COMERCIO Y LA INDUSTRIA RIOJANA DE SANTI DE SANTOS

Follow @SantideSantos El vino de Rioja que conocemos hoy sería muy diferente  si en el pasado no se hubieran perfeccionado unas eficientes redes de comercialización.  Madrid como capital de España, y especialmente a finales del s. XIX, va adquiriendo mayor dimensión demografica y económica, es un lugar donde las más importantes bodegas históricas del Rioja  abren su despachos de vinos, depósitos, sucursales o tienen representante. Muchas veces, a cargo de este negocio se encontraba un riojano, otras, eran establecimientos que embotellaban su propia marca de rioja, y la mayoría de las veces, se compartían con otra actividad, entre las que se encontraban las de tienda de ultramarinos, almacenes de bebidas, pastelerías...  A través de estas delegaciones y sucursales se surtían al pequeño comercio y en algunos casos, se vendía directamente a particulares. --------------- Este post está organizado por pizarras visuales. Se irá actualizando continuamente e incorporando nuevas bodega

VENDER LA IMAGEN DE LA FÁBRICA . Un anuncio de una agencia de publicidad de Madrid que se publicó en LA RIOJA de1910 tenía el siguiente eslogan: "Al siglo del vapor y la electricidad ha seguido el de la publicidad. Es importante enseñar al cliente lo grande, lo bonita... que es la industria que produce aquello que compra". Con los avances de la imprenta, especialmentecon la litografía (1796) la cromolitografía (1835) y linotipia (1885) progresivamente se incorpora la imagen industrial de la fábrica y el comercio como elemento publicitario. En el último tercio del siglo XIX evolucina la papelería comercial con toda clase de prospectos, catálogos e impresos con sus cabeceras ilustradas, muchos de ellos con sus rótulos e imágenes que representaban a la fábrica y al comercio.   En las revistas ilustradas nos enseñaban las maravillas del momento y entre ellas, no faltaban las " fabricas modelo ", todas con su chimenea, su máquina de vapor. su tren o sus carretas en

Hasta que  Conservas Trevijano e Hijos  las fabricó de forma industrial, la mermelada en España en el s. XIX era un producto de confitería o de importación.   Su catálogo, era impresionante por la variedad de su oferta, pero sus inicios, no fueron fáciles y tuvo que ingeniárselas para  popularizar en España su consumo.   (VER POST. 'Conservas Trevijano') Esta tarjeta de 1933 nos ofrece la normalidad del consumo de mermelada como un alimento popular,  pero a finales del s. XIX era  novedoso. DE LA MERMELADA INGLESA CON NARANJAS DE SEVILLA, A LA MERMELADA ESPAÑOLA CON ETIQUETA INGLESA. La Casa Real Británica desde el s. XVIII consumía la tradicional mermelada de naranjas amargas hecha con la fruta traída desde Sevilla. Un siglo después, gracias a Conservas Trevijano e Hijos , se dio un paso cualitativo importante, exportando la mermelada española elaborada de forma industrial. Todo ello fue posible gracias a tres avances en la tecnología de los alimentos:   1) El invento de Ni

A veces, la arquitectura supera su funcionalidad,  hoy  conocemos el Sanatorio quirúrgico del Dr. Cospedal, como una referencia más de los múltiples usos que tuvo el palacete de Vara de Rey, 1, derribado en 1976.   Pero el citado Sanatorio, que se ubicó en este emblemático edificio desde  el 7 de febrero de 1924 hasta después de la Guerra Civil, merece un espacio en la historia por sus  propio   méritos. Fue uno de los más modernos y afamados de Logroño. Era c onocido, y sobre todo reconocido por ser su director el  Dr. Antonio Cospedal Núñ ez , el hijo y buen discípulo, de uno de los hombres más destacados de la cirugía y medicina española moderna, especialmente en la rama de ginecología,   . LOS COSPEDAL, UNA GRAN FAMILIA DE MÉDICOS Antonio María, Cospedal Tomé, "el médico sabio"  El  Dr. Antonio María Cospedal Tomé  fue un gran médico  Académico de la Real Academia Nacional de la Medicina de España, profesor de la Universidad C

Calzados Antón,   tiene sus orígenes a pp. s. XX   y   será una de las zapaterías logroñesas más afamadas que llegaran hasta nuestros días. Cuando en 1914, Antón Veicoechea decide establecer en la calle Marqués de San Nicolás, 63-2º (traseras del Moderno) un pequeño taller de compostura y zapatería, su futuro y viabilidad no debía ser demasiado esperanzador, ya que tres años después de abrir este pequeño negocio, se presenta a las oposiciones de Correos y por unos pocos años, ejerce de funcionario de esta institución. A pesar de las dificultades iniciales, su evolución y progresos son continuos. Son frecuentes por esos años los anuncios en los que demanda aprendices y oficiales. Así en poco años trabajan para él hasta diez operarios, y su taller, además de composturas, vende también calzado de otras lugares de España. Registro de rótulo en 1945 Su éxito es tal,  que en 1924  dio su salto definitivo y amplia su industria, abriendo en junio de  ese año una pequeña tienda  par